El primer baño del bebé en la piscina

Dentro de unas semanas comenzará el verano, una de las mejores épocas para disfrutar de los más pequeños de la casa. Si este año es su primer verano y por tanto, su primer contacto con la piscina, deberás saber que los bebés disfrutan muchísimo cuando están en contacto con el agua. Además, resulta muy beneficio para estimular la mente, el movimiento y la afectividad. Antes de nada, debes saber que entre los 6-12 meses es la edad perfecta para iniciarles en las actividades acuáticas. Del mismo modo, antes de darles su primer baño en la piscina debes tener en cuenta una serie de recomendaciones tanto a la hora de meter a tu bebé en el agua como la bolsa que debes llevar.

Uno de los productos que nunca debe faltar en tu bolsa de piscina cuando vayas con tu bebé es la crema de protección solar (solo aplicar si tiene más de seis meses, de lo contrario evita exponerles al sol). Asimismo, deberás llevarle un gorro y gafas de sol así como pañales especiales para agua y bañadores de repuesto de forma que le quites la humedad en cuanto salga del agua para evitar que coja frio o que se le irrite la piel. Además, deberás ponerle una camiseta de algodón para proteger del sol. Recuerda buscar un sitio que dé totalmente la sombra.

Otro aspecto importante es elegir el momento adecuado para ir a la piscina. Evita las horas en las que tenga hambre o sueño. Las mejores horas son o bien por la mañana antes de comer, pero nunca a las horas centrales del día ya que el sol es más intenso o bien por la tarde después de su siesta. De esta forma, disfrutará de su experiencia en el agua. También deberás elegir una hora donde no haya niños gritando, salpicando o tirándose cerca ya que el bebé podría asustarse y acabar llorando.

Por otro lado, es importante que no le metas de golpe. El bebé necesita un proceso de adaptación y por tanto, deberemos mojarle los pies, las piernas y los brazos en primer lugar y posteriormente, meterle poco a poco. Nunca te metes en la piscina con tu bebé en brazos ya que te puedes resbalar mientras bajas la escalera. Entra tu primero y pide la ayuda a algún vecino o al socorrista para que te lo dé. Una vez dentro de la piscina, mantén al bebé bien sujeto, agárralo por las axilas, sin soltarle ni un momento. No se recomienda el uso de flotadores o manguitos en bebés. Y no te olvides de jugar con tu hijo para que la experiencia sea más agradable y bonita. Normalmente, los bebés tienden a chapotear en el agua y no paran de mover sus piernas.

Si en algún momento empieza a llorar, desde pequesybebes te recomendamos sacarlo del agua e internarlo más tarde. Pasado 10 minutos, deberás sacarle del agua para que no se quede frío o se canse demasiado. Recuerda secarle bien con una toalla y quitarle el bañador de bebé. Ponle un nuevo pañal y una camiseta o body de algodón orgánico.